La Policía de la Generalitat Valenciana, en colaboración con el Grupo 1º de Robos de la Comisaría Provincial de Albacete, ha intervenido cuatro pinturas fraudulentas que se pretendían vender por un total de 13.503.500 euros. Las obras, que se atribuían a los renombrados artistas Pablo Ruiz Picasso y Benjamín Palencia Pérez, resultaron ser falsificaciones.
Las investigaciones comenzaron a principios de año, y han llevado a la detención de cinco personas acusadas de estafa y delitos contra la propiedad intelectual. Los arrestados habían presentado las obras como parte de una herencia y habían intentado venderlas a precios exorbitantes.
El Grupo de Patrimonio Histórico de la Policía Nacional Adscrita a la Generalitat confirmó, con la ayuda de la entidad Succesion Picasso, que las tres pinturas atribuidas a Picasso no eran auténticas. A pesar de haber recibido un informe negativo sobre la autenticidad de una de ellas en 2016, los detenidos continuaron comercializándola por 10 millones de euros.
La pintura que se atribuía a Benjamín Palencia fue desmentida por el sobrino-nieto del artista, quien certificó que tanto la obra como la firma eran falsas. La intervención y detenciones subrayan el compromiso de las autoridades con la protección de la propiedad intelectual y la prevención del fraude en el mercado del arte.
