Un total de 24.244 estudiantes de la Comunitat Valenciana se presentarán a las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU) de 2024, representando un aumento del 5,62 % en comparación con 2023. Así lo ha informado la Secretaría Autonómica de Universidades antes del inicio de las pruebas el próximo martes.
Entre estos estudiantes, el 59 % son mujeres y el 41 % hombres. La mayoría, un 92 %, proviene de Bachillerato, mientras que el 8 % restante llega tras completar un ciclo formativo. Cabe destacar que la matrícula de estudiantes de ciclos formativos ha crecido un 13 % este año, según señaló la secretaria autonómica de Universidades, Esther Gómez. Este grupo se matricula únicamente en la fase voluntaria de las PAU.
Por universidades, 7.002 estudiantes realizarán las pruebas en la Universitat de València (UV); 6.096 en la Universitat Politècnica de València (UPV); 4.123 en la Universidad de Alicante (UA); 2.793 en la Universitat Jaume I de Castelló (UJI) y 4.230 en la Universidad Miguel Hernández de Elche (UMH).
Las pruebas de la convocatoria ordinaria comenzarán el martes 4 de junio con el examen de Castellano y finalizarán el jueves 6 de junio con Matemáticas Aplicadas a las Ciencias Sociales y Artes Escénicas II. Si se produce algún solapamiento en los horarios de los exámenes, se podría realizar alguna prueba el viernes 7 de junio, aunque hasta la fecha no hay solicitudes al respecto.
Las notas estarán disponibles el 14 de junio a partir de las 13:00 horas, y el periodo de revisión será del 17 al 19 de junio hasta las 14:00 horas.
Este curso ha aumentado el número total de asignaturas a evaluar, de 24 a 31. A pesar de este incremento, la Comisión Gestora ha logrado mantener la duración de las pruebas en tres días, con la opción de usar el viernes de manera extraordinaria en caso de solapamientos no resolvibles de otra forma.
Además, Historia de España e Historia de la Filosofía vuelven a ser obligatorias, debiendo los estudiantes elegir una de las dos en la fase obligatoria. Este será el último año con la modalidad «pandemia», permitiendo a los alumnos la máxima optatividad al responder las preguntas de los exámenes.
Crece el número de adaptaciones en exámenes
Este año, el número de estudiantes con adaptaciones en los exámenes ha aumentado en 289, un 41 % más que el curso pasado. Por ejemplo, los estudiantes con trastorno de déficit de atención tendrán más tiempo para completar la prueba. También, aquellos con problemas de visión recibirán exámenes con letra más grande.
Para los estudiantes con dislexia, las faltas de ortografía serán penalizadas con un criterio menos estricto. No se considerarán errores como la omisión de letras, sustitución de grafemas por otros de sonoridad similar, transposición de grafemas o mezcla de mayúsculas y minúsculas. Las faltas ortográficas regladas en las áreas lingüísticas solo se penalizarán hasta 2/3 de la puntuación total, con un máximo de 3 puntos. Esto incluye reglas como r/rr, m/n, c/qu, z/c, g/gu, güe/güi o -z/-d.
Además, cada universidad pública ofrecerá una plaza adicional en cada grado para estudiantes procedentes de sistemas de protección de menores, es decir, para aquellos tutelados o extutelados que no hayan conseguido plaza en la fase ordinaria.
